Por Norelys Morales Aguilera.
EL PAÍS, del «reino español», que se lo creen todavía, publica un vomitivo titular e informe sobre el despido del periodista Víctor Hugo Morales en Argentina, donde dice que: «generó una profunda indignación en todos los sectores políticos y periodísticos cercanos al kirchnerismo, ahora en la oposición».
Figúrese usted que el suceso ocurriera en alguno de los países latinoamericanos que han etiqueteado como «populistas». Dígase Venezuela, Ecuador, Bolivia, Nicaragua… y en Cuba, sería un Armageddon mediático.
Pero, para que nadie dude, el medio derechista y franquista lo explica con los motivos que los censores aplicaron:
«Radio Continental (propiedad del Grupo PRISA, editor de EL PAÍS) decidió prescindir de Morales, que hacía el programa centrado en la actualidad política de 9.00 a 13.00 y también tenía un espacio deportivo, «debido a reiterados incumplimientos contractuales que alteraron el normal desarrollo de las emisiones», según el comunicado oficial, que anuncia una nueva programación para los próximos días. Y, punto. Manipular y estar de acuerdo, es mejor que acallar el escándalo.
Por el momento la Sociedad Interamericana de Prensa, SIP, y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CDH, muy ágiles en denostar a sus contrincantes, que tanto pregonan la libertad de expresión, y otros pretextos para usos agresivos, están más quietos que estate quieto y mudos.
Tomado de Isla Mia