Por Luis Ernesto Ruiz Martínez.
Un humorista cubano hizo famoso aquel estribillo: “el coco no tiene agua, no tiene masa, no tiene ná.. ya la tenerá”, pero se quedó corto, porque el Coco, al menos este otro que de humorista no tiene un pelo (aunque ya casi de ninguna clase), seguirá montando su show mientras encuentre público para sus historietas. Ha llegado a la cifra de 25 “huelgas de hambre” y sigue ahí, con su “escultural cuerpo” por las pantallas de una pila de televisoras sin que le pongan freno a su aventura.
Yo no soy médico, pero no creo que haya organismo que aguante ese tipo de huelgas, claro, cuando son de verdad. Hasta el más ferviente seguidor de sus locuras, sabe, muy bien, que las que monta Guillermo Fariñas son de “mentirita”, como también algunas otras que se hicieron y se siguen haciendo bajo instrucciones de Miami.
Por si usted no está muy al tanto de estos temas de poca monta, pese a las sobredimensiones que les ponen los chicos de la CIA, han salido varias revelaciones muy interesantes que bien vale la pena, por lo menos, leer. El tipo debió haber sido actor, seguro que alguna que otra serie debe andar tratando de contratarlo, pero la cosa no le ha salido bien porque sus cronistas le están “jodiendo la huelga”.
Ya va por 25 huelgas y no se muere, demostró “científicamente” que la Tropicola, bebida 100% cubana, es muy efectiva para mantenerse activo y la más reciente de las filtraciones apunta a que se trata de un paciente con un amplio historial psiquiátrico.
Más claro, ni el agua. Y todavía nos quieren hacer creer que el Coco no tiene agua…
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Este viejo mercenario lo que está es enfermo de los nervios y quiere retomar protagonismo, se sintió fuera de contexto y olvidado, recurre a los métodos viejos