El árbol inmortal. #Cuba #FidelPorSiempre

Por: Gabriel Casanova*

Estos son días de pesares para los revolucionarios del mundo. Resulta imposible creer que se cumpliera un año de aquel triste e insuperable suceso, es por ello que debemos aprender a crear fuerzas para seguir el camino enchapado con piedras de victorias que nos construyó nuestro Comandante en Jefe.

No había visto en mi vida 90 años tan gloriosos y fructíferos como los que vivió Fidel. 90 años de historia, de sacrificio, de combate, de solidaridad, de entrega, de fuerza, de compromiso, de humanismo, 90 años de amor. Y ahora me doy cuenta que Fidel no vivió nunca para él, sino para nosotros. Se consagró para que los cubanos fuéramos gente libre, culta, honrada, valiente, tenaz, guerrillera y solidaria. Pero una vida de 90 años no nos basta y cuesta mucho acostumbrarse a su partida.

Por esta razón, Fidel, el pueblo cubano no te permite morir, no te permite dejarlo, no te permite salir del corazón de cada uno de nosotros. Los hombres de la talla de Fidel nunca mueren, siguen siendo faro y guía de las nuevas generaciones. Esos Pinos Nuevos a los que les corresponde ser presente y futuro, ser fieles continuadores de esta genuina obra: La Revolución cubana.

Prefiero pensar que Fidel no murió, que solo dejó su cuerpo para escalar a un plano superior, para poder estar en todas las partes del mundo donde lo necesiten, y que esté donde esté seguirá siendo nuestro eterno Comandante, nuestro líder indiscutible, una llama ardiente, el motor que impulsa nuestro actuar diario.

Que sepa Raúl que este pueblo confía en él y lo apoya. Que la juventud sigue a su lado, siendo un bastión inexpugnable, esa arcilla fundamental con la que se han construido todos los grandes logros de los que hoy puede disfrutar cada cubano. Una revolución dentro de la Revolución.

Mi Comandante en Jefe es y será siempre un eterno Caguairán, con 11 millones de ramas y unas raíces revolucionarias muy profundas, imposibles de sacar de la tierra que conforma nuestra Patria. Patria que es libre y soberana gracias a la sombra que nos brinda este árbol imperecedero con sus hojas verde olivo.

Gracias por todo Fidel.

*Colaborador de Cuba por siempre.