¿Tendrá idea Facebook de qué tipo de propaganda es la que Radio Martí quiere hacer llegar camuflada a través de su plataforma a los internautas cubanos?
Como ya hemos dicho en anteriores trabajos, luego de haber sido acusada de permitir en su plataforma la influencia de países como Rusia en las elecciones de 2016, Facebook se encuentra enfrascada en una campaña para eliminar la propaganda pagada en sus páginas.
El último esfuerzo para mejorar su imagen de «imparcialidad» tuvo lugar este martes cuando la red social eliminó más de 650 páginas, grupos y cuentas identificadas como «redes de cuentas engañosas respecto a sus cometidos», según su jefe ejecutivo Mark Zuckerberg.
La «conspiración» desmontada por Facebook, según se le informó a las autoridades estadounidenses, era realizada desde páginas que fueron rastreadas hasta Irán y grupos vinculados con operaciones de la inteligencia rusa.
De acuerdo con Facebook las cuentas, también en Instagram propiedad de Facebook, que eran presentadas como noticias independientes o grupos de la sociedad civil, en realidad trabajaban en esfuerzo coordinado para llegar a usuarios de Reino Unido, América Latina, Medio Oriente y Estados Unidos.
Las páginas, según el jefe de ciberseguridad de la policía, Nathaniel Gleicher, estaban vinculadas con medios estatales iraníes a través de la información de registro del sitio web (disponible públicamente), de la dirección de los computadores y de la información sobre los administradores. Tal es el caso de «Quest 4 Truth» que afirma ser de una organización independiente de medios iraníes.
La mayoría de las cuentas eliminadas centraban su actividad en Oriente Próximo y trataban de manipular la opinión pública sobre ciertas políticas de EEUU y hacia posiciones anti-Israel y anti-Arabia Saudí y propalestinas.
La misma fuente también dijo, en conferencia de prensa, que Facebook eliminó un conjunto de páginas y cuentas identificadas previamente por el gobierno de Estados Unidos como servicios militares rusos y según las informaciones hechas públicas por la red social no estaba relacionada con la de Irán.
Según publicó El HuffPost esta red contaba con 813.000 cuentas en Facebook y 10.000 en Instagram y se gastó unos 6.000 dólares en anuncios en la red social entre 2012 y abril de 2018.
O sea, que de acuerdo con las últimas políticas de Facebook, las redes eliminadas no solo estaban relacionadas con gobiernos a los que Washington tiene ahora mismo en la mira de sus sanciones, sino que, además, pagaban publicidad para poder transmitir sus mensajes políticos.
Hasta aquí todo bien si se tiene en cuenta de que como empresa Facebook se aroga el derecho de acoger, o no, en su plataforma la propaganda política pagada. El problema está en si la red social más grande del mundo va a ser, o no, consecuente con dichos principios empresariales con otros tipos de «propaganda política pagada».
Por supuesto que nos referimos al tipo de propaganda que desde hace ya tiempo usa esa red social como medio contra Cuba, algo que acaba de ser corroborado en los documentos presupuestarios para los años fiscales 2018 y 2019 de la Junta de Gobernadores de Radiodifusión de los Estados Unidos, hecho público este martes por el sitio Miami New Times.
El documento señala que el gobierno tiene planes de usar cuentas cubanas de Facebook «nativas» y «sin marca» para difundir contenido creado por el gobierno sin informar a los usuarios cubanos de Facebook:
Debido al bloqueo web de la radio y TV Martí en la isla, la estrategia digital de la OCB ha cambiado a las redes sociales consistente con las prácticas que ubican a YouTube, Google y Facebook entre los sitios más visitados en Cuba. Con el uso de la tecnología AVRA, los programas de Radio Martí se transformaron en radio visual y se transmitieron a través de Facebook Live junto con la programación de TV Marti. Esto proporciona a la OCB una
distribución adicional eficiente y rentable tanto para su radio (radio visual) como para el contenido de TV.
En el año fiscal 2018, la OCB está creando en la isla equipos digitales para que creen cuentas de Facebook ficticias para diseminar información. Las páginas abiertas en Cuba aumentan las posibilidades de aparecer en las noticias de los usuarios cubanos de Facebook. La misma estrategia se replicará en otras redes sociales.
Según el Miami New Times, el documento presupuestario sugiere que la OCB (Oficina de Radiodifusión hacia Cuba) planea difundir la propaganda estadounidense contra Cuba a través de canales de Facebook diseñados para engañar a los usuarios de la Isla y hacerles creer que la información proviene de otros usuarios cubanos, no de la oficina de Radio Martí.
¿Tendrá idea Facebook de qué tipo de propaganda es la que OCB quiere hacer llegar camuflada a través de su plataforma a los internautas cubanos? En cuanto a quién la paga no existe ninguna duda. Desde los años 80 del siglo pasado, cuando fue creada la mal llamada Radio Martí por el gobierno de Ronald Reagan, esa emisora no ha cesado en sus intentos de transmitir propaganda subversiva contra la Revolución cubana, ya sea a través de las ondas radiales o televisivas, o más recientemente mediante el uso de las nuevas tecnologías. Como apunta en su artículo el Miami New Times en 2014, el OCB creó el servicio de mensajes de texto no deseado Piramideo (Pyramid), que «tampoco logró fomentar la disidencia en Cuba» y durante años pasó de contrabando pequeños dispositivos satelitales que podrían proporcionar acceso a Internet hasta que se detuvo dicho tráfico en 2015 debido a los excesivos costos.
Aunque, como también hemos dicho otras veces, el discurso de odio contra Cuba abunda en esa red social, citado también por el Miami New Times, Nasserie Carew, portavoz de la Junta de Gobernadores de Radiodifusión, dijo que el proyecto de Facebook «nunca despegó». Pero como bien apuntó dicha publicación esa es una «respuesta extraña» si se tiene en cuenta de que el plan ha sido referenciado en documentos que justifican el presupuesto de 2018-2019.
Extraño también resulta que Facebook, una red social que se presenta ante el mundo como una empresa independiente, aparezca mencionada como parte de un plan de la guerra sucia contra Cuba en un documento de una entidad del gobierno de Estados Unidos. ¿Tendrá Facebook algo que ver con el Task Force creado en enero pasado por el gobierno de Trump que, según el Departamento de Estado, «examinará los desafíos tecnológicos y las oportunidades para ampliar el acceso a Internet y los medios independientes en Cuba» y buscará maneras de difundir el uso de redes sociales y el acceso a Internet sin censura en la isla?
Aunque el portavoz de Facebook no respondió a los múltiples mensajes que le enviara el articulista de New Times sobre el tema, es de presumir que los planes de la nueva campaña subversiva de la OBC contra Cuba no cuenten con la aquiescencia de esa red social por la simple razón de que, como señaló el profesor de la Universidad Estatal de Pensilvania John S. Nichols, coautor del libro de 1987 Clandestine Radio Broadcasting, en la publicación citada:
“Terceros países ven lo que estamos haciendo y dicen: ‘Aquí va Estados Unidos de nuevo haciendo esas tonterías. Es bajo, mezquino y no digno de un gran poder. Otros países dirán: ‘Si EE. UU. está dispuestos a violar la ley internacional, ¿por qué deberíamos obedecer nuestras obligaciones contractuales?’ Creo que tiene un efecto negativo a largo plazo. Y dado lo que Radio y TV Martí podrían estar haciendo en este momento, nos cuesta mucho quejarnos de lo que otros países podrían estar haciendo contra nosotros”.
Demás está decir que, en medio de la campaña anti desinformación en que se encuentra enfrascado Facebook, eliminar de su plataforma la propaganda subversiva contra Cuba aumentaría con creces la confianza de sus usuarios. No debe además muy difícil concretar tal empeño si se tiene en cuenta de que el informe presupuestario de la Junta de Gorbenadores de la Radiodifusión le ha ahorrado tiempo y recursos de la investigación.
Tomado de: Cubasí