Por Joselyn Muñoz Cruz*
Esa bandera que ondea en medio de la adversidad
sobre un techo derrumbado, llena de dignidad.
Esa bandera orgullosa de sus hijos e hijas
que entre llantos y sonrisas se mantiene con honor erguida.
Esta bandera legada de tantas luchas vencidas,
ante tanta desventura ondea ahora más digna.
Del escombro y de la ruina se levanta retadora,
porque esta es nuestra hora de hacerla lucir más linda.
Ondea bandera hermosa, ondea bandera mía,
que ni mil tornados furiosos tus franjas deslucirían.
Oronda vislumbra tu estrella como verdadera insignia.
Te empina un orgulloso cubano de mi #Habana querida,
que ante el frío imponente de enero, hoy restaña sus heridas.
Cuba por Siempre 
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