El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, así como Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad del Caribe rindieron homenaje a las víctimas del atentado terrorista contra el avión de cubana el 6 de octubre de 1976.
Frente al Monumento a los mártires de Barbados, en Holetown, inaugurado hace 24 años por Fidel, el mandatario cubano recordó al niño que era Tin Cremata cuando aquel acto de terrorismo lo privó de su padre.
El Caribe honró este martes la vida y condenó la injusticia. Este sitio y memorial confirman que Cuba solo puede estar en la lista, si existiera, de las víctimas del terrorismo, patentizó Díaz-Canel.
Si estamos hoy aquí, junto al joven que fue aquel niño, rindiendo tributo a su padre y a las demás víctimas de un crimen tan deleznable, es porque los buenos ganan a la larga. Cuba salvó al amor de las garras del odio, acentuó.