Carta de amor de Karl Marx a Jenny von Westphalen

carlos-marx-janne
21 de junio de 1856
 
Querida mía:
 
De nuevo te escribo porque me encuentro solo y porque me apena siempre tener que charlar contigo sin que lo sepas ni me oigas, ni puedas contestarme. Por más malo que sea tu retrato, me sirve perfectamente, y, ahora, comprendo por qué perfectamente, y por qué hasta las «lóbregas madonnas», las más imperfectas imágenes de la Madre de Dios, podían encontrar celosos y hasta más numerosos admiradores que las imágenes buenas. En todo caso, ninguna de esas oscuras imágenes de madonna ha sido tan besada, ninguna ha sido mirada con tanta veneración y enternecimiento, ni adorada tanto como esta foto tuya, que si bien no es lóbrega, sí es sombría, y en modo alguno representa tu hermoso, encantador y «dulce» rostro que parece haber sido creado para los besos. Yo perfecciono lo que estamparon mal los rayos del sol y llego a la conclusión de que mi vista, por muy descuidada que esté por la luz del quinqué y el humo del tabaco, es capaz de representar imágenes no sólo en sueños, sino también en la realidad.

 
Te veo, siento, toda delante de mí, como de carne y hueso… el falso y vacío mundo se forma una idea superficial y equivocada de las personas. ¿Quién entre mis numerosos calumniadores y maldicientes enemigos me ha reprochado alguna vez valer para el papel de primer galán en cualquier teatro de segunda categoría? Pero es que soy así. Si esos canallas tuvieron siquiera una gota de sentido del humor, habrían garrapateado en el anverso «relaciones de producción y cambio» y en el reverso me habrían dibujado postrado a tus pies, «mire este dibujo y el otro», rezaría la inscripción. Pero los canallas son tontos y seguirán siendo necios in secula seculorum.*
 
La separación temporal es útil ya que la comunicación constante origina la apariencia de monotonía que lima la diferencia entre las cosas. Hasta las torres de cerca no parecen tan altas, mientras que las minucias de la vida diaria, al tropezar con ellas, crecen desmesuradamente. Lo mismo sucede con las pasiones: los hábitos consuetudinarios que, como resultado de la proximidad se apoderan del hombre por entero y toman forma de pasión, dejan de existir tan pronto desaparece del campo visual su objeto directo. Las pasiones profundas, que como resultado de la cercanía de su objetivo se convierten en hábitos consuetudinarios, crecen y recuperan su vigor bajo el mágico influjo de la ausencia.
 
Así es mi amor. Al punto que nos separa el espacio, me convenzo de que el tiempo le sirve a mi amor tan solo para lo que el sol y la lluvia le sirven a la planta: para que crezca. Mi amor por ti, cuando te encuentras lejos de mí, se presenta tal y como es en realidad: como un gigante; en él se concentra toda mi energía espiritual y todo el vigor de mis sentimientos.
 
Adiós, querida mía, te mando a ti y a nuestras hijas miles y miles de besos.
 
 
Tu Carlos.
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7 respuestas a Carta de amor de Karl Marx a Jenny von Westphalen

  1. Abel Suárez dijo:

    Ese Carlitos, era todo un loquillo….

  2. Anónimo dijo:

    Eso si es amor

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  4. Anónimo dijo:

    Hermosa carta sencible que muestra la real necesidad de que necesitamos a alguien siempre, hay un dicho que dice detras de cada gran hombre hay una gran mujer tambien hay hijos que se sacrificaron . El vivió su dimensión sujeta a la dimensión de una realidad histórica de una Inglaterra , donde hasta los niños eran esclavizados. Pero hoy sigue siendo la misma historia en muchas parte El mismo ejemplo es la foto que se saco con su amada esposa demuestra el lugar que el tenia reservado para la mujer similar al que tenía el imperio romano y sus senadores, emperadores y todas las castas de poder, cultura que tambien viene de los griegos donde sostenían que la mujer no tenían alma por eso ellas eran esclavas, eso no quiere decir que no fuera inteligente y defensor de los más necesitados. El fue trabajador como filosofo como periodista como analista de la realidad que le toco, vivo como pensador y nos dejo un extenso material de estudio y de análisis, sujeto a la realidad que él estaba viviendo. Otros tuvieron mas trabajos más análisis y más experiencia pero fueron vulgarmente transgiversados, me refiero a Jesús trabajo como carpintero como panadero como agricultor como sanador como curandero como filosofo como pensador. Jesús no tenia fotos tubo toda una familia que siempre lo acompaño incluso su compañera Magdalena quien lo descuelga de la cruz, donde fue sacrificado en la entrada de Jerusalén . Lugar ejemplarizante de todos aquellos que se atrevieran a difamar al imperio y a las castas de rabinos de aquel momento, bien lo supo aprovechar la religión politeísta del imperio romano donde en el templo de vaticinio crearon con las ideas que el trajo para dominar y seguir explotando a los mismos necesitados. Tuvieron un mismo destino sacrificarse hasta sus propias vidas por el prójimo, las castas de poder apoyados en las creencias basadas en los miedos fue propio de dichas castas para sostener el poder y esclavizar al prójimo. Esa es la lucha y para creer en un dios no hace falta sacrificar a nuestros hijos como aun hoy se sigue enseñando Abraham para demostrar su fe en un supuesto dios supuestamente estaba dispuesto a sacrificar la vida de su hijo. Me llama la atención Freud, donde muchas de sus discípulas sicólogas criticaron su actitud de interpretar a su propia hija, nunca se ha tocado el tema de Abraham en ese tema y aun hoy en día se sigue sosteniendo. Hoy por hoy estos mismo creyentes israelita están atacando familias enteras de palestina, es relevante que si ellos crecieron con esa deformación de sacrificar a sus propios hijos lo que pueden llegar hacer con los hijos de otros pueblos.

  5. luis dijo:

    El vivió su dimensión sujeta a la dimensión de una realidad histórica de una Inglaterra , donde hasta los niños eran esclavizados. Pero hoy sigue siendo la misma historia en muchas parte El mismo ejemplo es la foto que se saco con su amada esposa demuestra el lugar que el tenia reservado para la mujer similar al que tenía el imperio romano y sus senadores, emperadores y todas las castas de poder, cultura que tambien viene de los griegos donde sostenían que la mujer no tenían alma por eso ellas eran esclavas, eso no quiere decir que no fuera inteligente y defensor de los más necesitados. El fue trabajador como filosofo como periodista como analista de la realidad que le toco, vivo como pensador y nos dejo un extenso material de estudio y de análisis, sujeto a la realidad que él estaba viviendo. Otros tuvieron mas trabajos más análisis y más experiencia pero fueron vulgarmente transgiversados, me refiero a Jesús trabajo como carpintero como panadero como agricultor como sanador como curandero como filosofo como pensador. Jesús no tenia fotos tubo toda una familia que siempre lo acompaño incluso su compañera Magdalena quien lo descuelga de la cruz, donde fue sacrificado en la entrada de Jerusalén . Lugar ejemplarizante de todos aquellos que se atrevieran a difamar al imperio y a las castas de rabinos de aquel momento, bien lo supo aprovechar la religión politeísta del imperio romano donde en el templo de vaticinio crearon con las ideas que el trajo para dominar y seguir explotando a los mismos necesitados. Tuvieron un mismo destino sacrificarse hasta sus propias vidas por el prójimo, las castas de poder apoyados en las creencias basadas en los miedos fue propio de dichas castas para sostener el poder y esclavizar al prójimo. Esa es la lucha y para creer en un dios no hace falta sacrificar a nuestros hijos como aun hoy se sigue enseñando Abraham para demostrar su fe en un supuesto dios supuestamente estaba dispuesto a sacrificar la vida de su hijo. Me llama la atención Freud, donde muchas de sus discípulas sicólogas criticaron su actitud de interpretar a su propia hija, nunca se ha tocado el tema de Abraham en ese tema y aun hoy en día se sigue sosteniendo. Hoy por hoy estos mismo creyentes israelita están atacando familias enteras de palestina, es relevante que si ellos crecieron con esa deformación de sacrificar a sus propios hijos lo que pueden llegar hacer con los hijos de otros pueblos.

  6. Daniel Reboredo Soria dijo:

    A continuación cito unos pasajes de la biografía que en 1985 escribiera Werner Blumenberg sobre Karl Marx. Me parece conveniente cotejarlos con la carta de 1856 que escribiera a su esposa Jenny Von Westphalen.

    «(…) un conflicto humano perturbó la relación conyugal a principios de los años sesenta, probablemente. En 1900 todos los dirigentes socialistas sabían que Marx era el padre de Frederick (Freddy) Demuth, el hijo de Helene Demuth. Pero no se hablaba del asunto, en parte porque el hecho les parecía escandaloso a los ojos de la moral burguesa imperante en la época, y en parte porque no se ajustaba a los rasgos heroicos e idílicos propio de un ídolo de las masas. Se borraron, pues, todas las huellas de ese hijo, y sólo la casualidad preservó de la destrucción una carta de Louise Freyberger-Kautsky dirigida a August Bebel que habló del asunto.» (página 139)

    «Helene Demuth, ama de llaves de la familia Marx durante largo tiempo, era la madre del hijo natural de Marx, un hijo por el que éste no se preocuparía nunca.» (página 140)

    «Eleanor, la hija menor de Marx, a quien todos llamaban Tussy, se negaba a creer que su padre hubiera podido tener un hijo con Helene Demuth, y se obstinaba en pensar que el padre real era Friedrich Engels.» (página 141)

    «(…). Marx siempre tuvo miedo de que su mujer, que era terriblemente celosa, le pidiese la separación; él no quería al niño, el escándalo hubiera sido demasiado grande, y no se atrevió a hacer nada por el chico (…).» (página 142: fragmento de la carta mencionada al principio del comentario).

    Marx no se sustrajo de la doble moral victoriana, burguesa, en lo que a su vida privada e íntima refiere. El gran filósofo, economista-político, ideólogo, periodista y cuadro anticapitalista, socialista y comunista, vivió sus relaciones conyugales y familiares dominando (y dominado) por el machismo, el sexismo, el patriarcalismo, la violencia de género y doméstica y el abuso de poder hacia la joven ama de llaves Helene Demuth y el «hijo natural» de ambos, por Marx ninguneado y silenciado por casi todo su círculo familiar, de amistad y político.

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